En las Iglesias, vas a encontrar grupo de niños y grupo de jóvenes, pero los adolecentes por lo general quedan en el aire y no se pueden ubicar en ninguno de los dos, o son muy grandes o muy pequeños. En Dejando Huella hemos implementado un grupo de esta edad para que no se enfrenten solos a la presión social y al cambio hormonal que tanto daño les puede hacer, queremos junto con los padres formar un equipo que los ayude a crecer en Dios.