Avivar el Fuego 4 (Empezar una Rutina)

21 Febrero 2021

Cuando hacemos cualquier cosa en nuestras vidas, debemos crear una rutina de trabajo, en la vida espiritual sucede lo mismos, con el tiempo esa rutina se convertirá en parte nuestra y será algo natural.

Una de las cosas que nos cuesta trabajo en nuestro diario vivir, el la disciplina, crear un hábito bueno es algo complicado, lo malo si lo aprendemos en pocas horas y nadie nos tiene que alentar, pero cuando se trata de algo saludable siempre hay oposición por parte de nosotros mismos, sentarnos a comer viendo televisión es muy sencillo, pero levantarnos y hacer ejercicio es otra historia.

Si queremos avivar el fuego en nosotros debemos entender que requiere esfuerzo y constancia, debemos hacerlo de tal manera que llegado el momento no nos demos cuenta que está ahí, si tenemos talentos debemos ponerlos a trabajar, Dios los colocó en nosotros con un propósito, no fue casualidad ni buena suerte, lamentablemente en nuestra sociedad buscamos tapar los talentos de las personas y ponerlos a hacer cosas que van contra su naturaleza.

Cuando empecé mi vida cristiana, recuerdo que estaba aprendiendo a orar, escuchaba de las personas que nos enseñaban que oraban durante horas, me propuse hacer lo mismo, para lo cual tomé un reloj, lo coloqué en mi cama y de rodillas empecé a contabilizar el tiempo, tenía que llegar a una hora, entonces empecé, bendije a mi familia, le di gracias a Dios por el día, en ese momento escuché unos pajaritos cantar y aproveché y se lo agradecí a Dios, lo alabé un momento y cuando terminé miré cuánto tiempo había transcurrido… tres minutos cuarenta segundos… ¡Dios mío no habían pasado ni cinco minutos! ¡cuándo llegaría a la hora!, no me desanimé seguí esforzándome día a día, fue subiendo de minuto en minuto, pasó mucho tiempo pero lo conseguí.

Así debe ser en cada área de nuestra vida espiritual, si tienes un don de sanidad, debes ponerte a practicar, tendrás que empezar por orar por una persona cada quince días, luego verás que la sanidad es más frecuente de cuando empezaste, poco a poco vas a llegar a la meta, quién sabe si el día de mañana seas usado grandemente para bendecir a multitudes, pero recuerda que todo se logra con esfuerzo y disciplina.

En la Iglesia del Señor hay una falta impresionante de obreros, si recuerdas Jesús mismo se lo dijo a sus discípulos, - orad al Señor de la mies que envíe obreros a su mies- esto es algo que siempre ha afectado a la iglesia, es muy triste para uno como pastor ver a tantas personas con tantos dones y talentos, sentados desperdiciando todo el potencial que tienen de parte de Dios, es por eso que Dios nos dice - despiértate tu que duermes- parecemos muertos, debemos levantarnos y resplandecer, mostrar la gloria de Dios a todos los que nos vean, es urgente avivar ese fuego de Dios en nuestras vidas.

Siéntate y haz un cronograma de trabajo, piensa que tienes que avivar y empieza a crear una rutina en tu vida, poco a poco verás que empiezas a arder en ese fuego y así serás grandemente bendecido.

17 y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado. Santiago 4:17

Pastor Miguel Ángel Tavera Escudero